Las actividades de soldadura como esmerilar, cortar y arcallar implican altos niveles de contaminación por el ruido generado. 

La exposición a ruidos fuertes puede dañar permanentemente la audición de los soldadores. El ruido también causa estrés y aumentada la presión arterial, y puede contribuir a enfermedades del corazón. Trabajar en ambientes con mucho ruido por largos períodos de tiempo puede hacer que los trabajadores se sientan cansados, nerviosos e irritables

De acuerdo a la OSHA, Código 29 de las Regulaciones Federales (29 Code of Federal Regulations – CFR, por su nombre y siglas en inglés) 1910.95, requiere que su empleador evalúe los niveles de ruido para determinar la exposición de los empleados.

Si el ruido sobrepasa los 85 decibeles durante una jornada de 8 horas es indispensable que el trabajador utilice protectores auditivos y realizar examen anual de audición.